En la avenida hacia el cierre del año 2024 la coyuntura política se vuelve a poner sobre el tapete, tres hechos de esta semana marcan su escenario. 

Por un lado la continuidad de los cortes de energía eléctrica y la ampliación de sus horas de corte han provocado la irregularidad de todos los sectores de la ciudadanía que a su vez se ha politizado y entrado el tema en el discurso electoral contra el gobierno nacional.

Las encuestas de los presidenciables en ese amplio grupo de candidaturas se observaba una punta con Daniel Noboa y Luisa González en cabeza, seguidos de Jan Topic y Leonidas Iza y muy atrás el pelotón de quienes no llegan al 0,3% de aceptación.

La salida del candidato de SUMA Jan Topic de la papeleta por motivos de conflictos de intereses al ser principal socio de TELCONET contratista del estado. Deja disperso esa aceptación o intención de voto cuantificada en un 10% de voto creciente.

La pre campaña no oficial, este ambiente de preparación y promoción de rostros y nombre de candidaturas presidenciables y legislativas, todo esto claro esta, todo el país lo mira menos el Consejo Nacional Electoral CNE cuya autoridad y consejeros están preocupados por prorrogarse en sus funciones ampliadas ya. 

​El proceso electoral 2025 esta marcado por el cierre final de esos dos términos izquierda - derecha, términos que hicieron referencia respecto de posiciones en el siglo pasado sin cabida ya en estos tiempos en el mundo, la región y Ecuador.

Las prioridades han cambiado, si para las presidenciales anteriores fue la dotación de vacunas contra el COVID, las intermedias se impuso el tema seguridad en esta coyuntura es resolver el sistema o la multiplicidad de sistemas de energía eléctrica.

Ya es insostenible la realidad de descomposición del estado tanto en sus finanzas, estructura administrativa y legitimidad con la sociedad civil, la agenda del próximo período legislativo estará en la reforma o nueva Constitución Política del estado.

Las previsiones están marcadas desde este espacio estarán entre Daniel Noboa quien ha manifestado estar entre la "social democracia" o "centro izquierda", sin embargo en su práctica ha tenido grandes rasgos del "populismo" tradicional, a pesar de que su antecedente histórico social y económico responde o debería responder a una gestión que encarne la burguesía industrial como clase social.

Por otro lado Luisa Gonzales cuya indefinición ideológica, económica, social y cultural se diluye frente a una identificación clara de su líder, tendencia y organización, los casos  judiciales en donde se desenvuelve dicha tendencia y el uso manipulador de imágenes, datos respecto de la administración 2005-2017.

En la tercera semana de noviembre 2024, nuevas tendencias arrojará el electorado aún indeciso en su gran porcentaje, sin duda como vengo planteando, los códigos, las formas, diálogos y acuerdos de las campañas electorales están cambiando y este cambio es para bien, la masa, los partidos de membrete, las sanguijuelas directores de los partidos en provincias, el marketing por encima de la ciencia política, se diluyen en una realidad de error. Detrás de la coyuntura.

Ambato y Tungurahua, ha sido tendencia en las redes sociales en medio del proceso electoral hacia el año 2025, sin duda lo volverán hacer ¿el motivo? la capital de los tungurahuaneses ha tenido un resultado electoral en los últimos procesos una particularidad, ha sostenido una línea lógica e histórica por la institucionalidad y la democracia, sin embargo ha sido objetivo del estatismo caudillista para expresar la mayor variedad de epítetos y adjetivos por ello.

Debemos contextualizar, el siglo empezó con la caída del gobierno demócrata cristiano de Jamil Mahuad (2000) período que lo finalizó su binomio el académico Gustavo Noboa, seguido por el triunfo electoral nunca antes visto de las listas 3-18, si nada mas y nada menos que Sociedad Patriótica y Pachakutic llegaron a la administración, aunque muchos digan que el brazo electoral indígena nunca ha gobernado, pues si, ya participó, ya ganó y ya fracaso también.

Luego del Golpe de Estado del año 2005, se abrió una ruptura en el proceso democrático del Ecuador, que estamos viviendo y es posible que dure mucho tiempo mas. En todo este período la ciudad de Ambato ha sostenido una decisión lógica e histórica.

​Deberemos revisar dos áreas de la posición política, por un lado la hegemónica con la representación legislativa en estos años, a inicios de siglo la representación estaba marcada en Tungurahua por el Partido Social Cristiano, Democracia Popular y uno que otro independiente que no dejo huella, hasta que se inicia la etapa estatista en 2007 en donde la entonces Alianza Pais tuvo fuerte representación legislativa compartida con el Partido Social Cristiano en minoría, ese resultado dejó una mala experiencia en la población tungurahuense, una representación de alza manos, enfocada en las disposiciones verticales del ejecutivo, a espaldas de las necesidades ciudadanas.

Por otro lado la sociedad civil, a mediados de los noventas se funda en Ambato el Movimiento Cultura Rebelde verdadera cantera de cuadros e influencia a nivel nacional, la ciudad debatió y discutió los acontecimientos del año 2000 y 2005. En Tungurahua se venia antecedido por el proceso local de 1999 que unió a todos los sectores e impulsó al menos en el tapete temas como la planificación y la gestión horizontal.

En Ambato se escuchó por primera vez la muerte de la derecha y la izquierda, por ello es falso eso de que Ambato es una localidad de derecha como el correismo mas fanático lo identifican, subrayando que dicha representación electoralista no es de izquierda, por los acontecimientos de todos estos años mas se posiciona como un espacio de problemas de corrupción y jurídicos, ninguna organización política en la historia del Ecuador ha tenido tantos problemas legales vinculados al mal uso de fondos públicos.​

En esta ocasión la papeleta electoral provincial presenta la variedad social, aunque hay poca agudeza en lo teórico y su doctrina, en una próxima entrega revisamos sus nombres y posturas, de jóvenes, hombres y mujeres en la papeleta electoral legislativa de Tungurahua 2025.

Dentro de la crisis crónica del estado ecuatoriano en su largo desprendimiento de la neo colonia, la modernidad a la posmodernidad y su real posibilidad de mantenimiento en el tiempo, le encuentra a la institución estado en un choque de funciones.

Fue el momento de La Ilustración que dió respuesta a la forma administrativa del estado que el nuevo sistema económico exigió, El Capitalismo estaba en formación y posicionamiento como hegemónico en el mundo occidental, esta realidad objetiva requería un modelo administrativo que desembocó en el liberal, de la pluma y pensamiento de los ilustrados entre el siglo XVIII y XIX tipo John Locke, Thomas Hobbes entre otros.


Esta concepción que definía a la sociedad dentro de un contrato social en el que todos los individuos ceden su poder a un tercero para el equilibrio de fuerzas, buscaba en El Estado armonizar el todo social, dividiéndolo en tres funciones, el ejecutivo, el legislativo y el judicial, las cuales sostendrían un solo poder expresado en la estructura pública para la armonía del ciudadano naciente.

​Es erroneo entonces hablar de poderes dispersos, pues el estado tiene un solo poder en tres funciones y en el caso de Ecuador desde 2008 en cinco funciones, la de participación ciudadana y electoral.

Mucha agua ha corrido bajo el puente desde la mecánica idealización de los ilustrados, que dominaron las ideas de los libertadores en América, sobre todo en la parte sur de nuestra sub región.

Los cambios mundiales sucedidos en el entorno geopolítico a fines del siglo pasado, conjuntamente con la revolución científico tecnológica y las nuevas versiones del capitalismo, generaron en Ecuador una realidad histórica distinta del experimento democrático de 1979 y sus reformas cautivas a intereses reducidos.

La presencia cada vez mas fuerte de diversas identidades y sujetos colectivos que desembocaron en los gobiernos caídos o casi desde 1985, 1997, 2000, 2005 posibilitó el uso demagógico para usar este hecho e impulsar el criterio de las cinco funciones y agudizar el engendro constitucional e institucional del estado ecuatoriano.

Sin embargo el problema fundamental sucedió al incorporar la economía ilegal en un escenario de dolarización, como la relación entre el caudillismo y el narco tráfico de diverso origen, arrinconando al estado a una respuesta militar y sobre todo degenerando al límite todo su sistema judicial y político.

Aquí el verdadero reto coyuntural que pondrá a prueba a la sociedad en su conjunto si va por línea de sostener el estado comprometido de 1830 o impulsar unidades regionales hacia un estado fuerte con identidades culturales y económicas locales en un mercado global.

Antecedido por cinco campañas electorales de su padre Álvaro Noboa Pontón y peticiones no concretas por administrar el estado ecuatoriano a su abuelo Luis Noboa Naranjo, Daniel Noboa Azín asume en su primer intento la presidencia de la república.

Su familia representa el emporio mas grande de la burguesía industrial en el Ecuador desde mediados del siglo XX, un tiempo en donde el mundo, la región y el país se vieron superados por la ideología mas que por la gestión de recursos en la producción.

La familia Noboa tuvo un antes y después luego de la muerte de su titular Luis Noboa Naranjo (1994) con una herencia calculada en mil doscientos millones de dólares de estadounidenses, la misma que definió la marcha del estado, la correlación de fuerzas en la propia burguesía industrial y las contradicciones entre industria, comercia internacional, y capital financiero.

La decisión negativa de Luis Noboa Naranjo de no postularse a la presidencia en 1979 y 1984, provocó que la burguesía se atrinchere en el caudillismo, expresado en uno de sus gerentes, el entonces Ingeniero León Febres Cordero que llegó a la presidencia de la mano del Partido Social Cristiano y del capital de los Noboa, no condujo ni provocó un programa político de la burguesía industrial sino un programa populista y caudillista.

​Fue entonces cuando la familia Noboa, supo que no podían dejar a "recaderos" su representación administrativa de la sociedad, entonces Álvaro Noboa Pontón arrancó su proceso político electoral, el había sido militante de la Juventud Comunista del Ecuador del PCE y escogió para su primera campaña nada mas y nada menos  que al Doctor Alfredo Castillo formado en la Unión Soviética y una pluma muy aguda del Partido Comunista del Ecuador en su tiempo.

​Corría el año 1998 y se enfrentó nada mas y nada menos que a Jamil Mahuad venido de la cantera de la Democracia Cristiana o Popular lista 5. 

El mismo movimiento que se arremolinó en la figura de Jaime Roldós Aguilera y a partir de su muerte resultaron los mas beneficiados, para el período 1984-1988 fueron acusados de haber potenciado un grupo de asaltantes y armados cuya pantalla fue amplificar un discurso del socialismo para ocultar el rostro demócrata cristiano, incluso uno de los canales de televisión de mayor influencia en el país les puso el nombre (AVC) eso impidió a sus jefes, Osvaldo Hurtado, Julio César Trujillo, Rodrigo Paz y el propio Mahuad  no salirse de su imagen de impolutos, transparentes y cúmulo de valores, irónicamente la misma fórmula se aplicaría después en el período 2005-2017.

Alvaro Noboa entonces denunció fraude electoral, en una elección en donde se jugó precisamente el quiebre de la burguesía nacionalista y la anti nacional además de la disputa por la herencia de Noboa Naranjo, posteriormente Alvaro perdió ante Lucio Gutiérrez y en otra obscura campaña ante Rafael Correa que representaba la misma bandera verde de Osvaldo Hurtado venida desde 1979.

Daniel Noboa representa entonces a la burguesía nacionalista, tiene como deber histórico superar a la burguesía anti patria, generar una nueva burguesía nacional, provocar un nuevo escenario de la lucha de clases y dar posibilidad de existencia al estado ecuatoriano.

Se enfrenta detrás de la puerta a una coyuntura a) El desempleo b) La seguridad.